El pan de pita es un pan plano típico de la cocina de Oriente Medio que se caracteriza por su interior hueco, a diferencia del pan naan, lo que lo hace ideal para rellenar de falafel, verduras asadas, tiras de carne breaseadas, etc. Seguro que lo conocéis de sobra, pero quizás no sepáis lo mega fácil que es de preparar y, por ello, nunca os habéis planteado hacerlo en casa. Pues bien, os adelanto que está "chupao" y que una vez que probéis el pan de pita casero no lo volveréis a comprar en el supermercado. Y es que este último os va a resultar seco e insípido, porque el sabor y la textura del casero son inigualables.
El pan de pita es un pan plano típico de la cocina de Oriente Medio que se caracteriza por su interior hueco, a diferencia del pan naan, lo que lo hace ideal para rellenar de falafel, verduras asadas, tiras de carne breaseadas, etc. Seguro que lo conocéis de sobra, pero quizás no sepáis lo mega fácil que es de preparar y, por ello, nunca os habéis planteado hacerlo en casa. Pues bien, os adelanto que está "chupao" y que una vez que probéis el pan de pita casero no lo volveréis a comprar en el supermercado. Y es que este último os va a resultar seco e insípido, porque el sabor y la textura del casero son inigualables.
Plancha de bizcocho tierna, esponjosa y flexible, muy fácil de enrollar y calar sin que el bizcocho se rompa. Este bizcocho base con sabor tradicional, suave y natural, es indicado para hacer brazos de gitano, tartas cuadradas por capas, o canapés con relleno salado, en un «plis»
Seis sabores de macarrones coloridos y afrutados con un ganache suave y ligero. Una deliciosa bandeja de macarrones de limón, caramelo salado, frambuesa, vainilla, chocolate y pistacho.
Los pasteles de Belén (en portugués, pastéis de Belém), también llamados pastéis de nata (en español tartaleta de huevo, o en traducción directa: pasteles de nata), son tartaletas de crema, elaboradas según una receta secreta que no ha sido desvelada en casi doscientos años y que, supuestamente, solo siete personas conocen en el planeta. Son una de las especialidades más características de la cocina portuguesa. Tanto la pasta como la crema comienzan a elaborarse a puerta cerrada, en el llamado "taller del secreto" (oficina do segredo), en un proceso que dura dos días. La pasta es de hojaldre. La crema tiene una base fundamental de yema de huevo, leche y azúcar. Se comen tanto en caliente como en frío.